Acerca del afieltrado



   Afieltrar es una técnica artesanal tradicional usada desde la antigüedad. Fundamentalmente se utilizaba para crear láminas con las que fabricar ropa, pero es posible aplicarla para crear figuras tridimensionales. A todos los efectos, es un tipo de escultura "blanda", muy llamativa y agradable al tacto. La gente que las ve siempre me pregunta: ¿Cómo está hecho esto? ¿Qué material es? ¿De verdad es lana? 

   Si. Las fibras naturales de la lana tienden a enredarse unas con otras con el agua caliente o la fricción, encogiendo en el proceso. Seguramente todos habéis tenido un jersey de lana que hacía "bolitas", o habéis oído de alguien que lo ha echado a la lavadora y ha encogido. Ese proceso es afieltrar (también llamado enfieltrar). Simplemente se trata de hacerlo de forma controlada, para poder determinar la forma de la figura. El método que yo uso es afieltrar con una aguja especial que enreda las fibras al pinchar la lana, y se conoce como "needle felting". Generalmente todo empieza con un armazón de alambre, por ejemplo de limpiapipas, y voy enrollando la lana sobre el, dándole una forma básica. Hay distintos tipos de lanas, más gruesas, más finas, más brillantes, más resistentes. Cada una es mejor para unas partes de las esculturas.

   Como veis, es un proceso bastante simple, y muy repetitivo. No es más que ir moldeando la figura, fijando la lana, compactándola y volviéndola más dura a base de "pinchar" muchísimas veces la escultura. Poco a poco, vamos dándole detalle, añadiendo relieve y uniendo piezas hasta conseguir el resultado deseado. Las figuras son bastante resistentes, y no pesan casi nada. Es posible mezclar colores, añadir sombras y brillos usando distintas lanas y agujas para trabajar los detalles de la figura. Con práctica, puedes hacer figuras de cualquier tamaño y todo lo complicadas que quieras. También es posible afieltrar usando agua caliente, los resultados son diferentes, y de hecho muchas de mis piezas están fabricadas mezclando ambas técnicas. 

  No es difícil aprender, y yo os lo recomiendo a todos. Solo hace falta paciencia y un poco de imaginación. Cada pieza lleva bastantes horas, dependiendo del tamaño y de lo detallada que sea. Aparte de llevarte algún pinchazo si no tienes cuidado, el resultado son pequeñas obras de arte de todo tipo: esculturas, llaveros, broches, adornos, apliques... Las posibilidades dependen sólo de la creatividad del artista. 

   Eso si, no las echéis a la lavadora por accidente, porque podrían deformarse.